Entradas

Me encanta ver películas en las que me pueda reir, hagan volar la imaginación y además dejen un mensaje para reflexionar.

Una película que cumple con todas estas características y que me la podría ver varias veces es Planeta Libre.

Planeta Libre (La Belle Verte, título original en francés) es una película de 1996 dirigida por  Coline Serreau.

planetalibre

Coline Serreau es una  actriz, directora, guionista y compositora nacida en Francia, aparece como protagonista en esta hermosa película que nos muestra de forma divertida y a la vez muy reflexiva la situación de nuestro planeta comparado con un imaginario planeta para el cual la Era Industrial y Capitalista es prehistoria, ya la vivieron y no quieren «devolverse» en el tiempo y dejar de disfrutar de la naturaleza tal cual es. También hasta dónde pudiéramos llegar si abrimos nuestra consciencia y empezamos a utilizar mejor nuestras capacidades humanas.

Obsérvala y cuéntanos qué te parece.

Los niños son nuestros grandes maestros. Cuando los observas sin juzgar puedes dejarte contagiar de su inocencia y sabiduría.

Al no estar tan condicionados como los adultos  tienen claro el sentido de la vida: hacer lo que te gusta y disfrutarlo.  Cuando descubrimos nuestra verdadera vocación con la que nos sentimos plenos y felices, el resto (dinero, recompensa) vendrá por añadidura y sobra tiempo y entusiasmo para Jugar, Reír, Cantar, Bailar, dejar salir toda la espontaneidad interior.

Te invitamos a que disfrutes este fabuloso video donde una hermosa niña le recuerda estas enseñanzas a su padre.

https://www.youtube.com/watch?v=6j-NyoHRnYo

A veces podemos sentir que no encajamos en nuestro mundo, que no tenemos nada por aportar o compartir, pero si nos quitamos la venda de los ojos y los juicios aplastantes, podemos encontrar otros seres que viven caminos paralelos a los nuestros con los que podemos compartir y construir las más bellas creaciones basadas en el amor.

Me encanta ver animaciones y más aún cuando dejan mucho para pensar como la siguiente: En un mundo que juzga a la gente por su número, Cero se enfrenta a un prejuicio y una persecución constante. Él anda un camino en soledad, hasta que un encuentro , por casualidad, cambia su vida para siempre.

Él conoce a una mujer Cero. Juntos, demuestran que a través de la determinación, del coraje y del amor, nada puede ser realmente algo.

No dejes de ver este cortometraje de animación realizado con la técnica de StopMotion realizado por Christopher Kezelos, que nos deja una bella enseñanza.

Una forma de practicar la auto-sanación es imaginar los órganos internos dentro de nosotros con una sonrisa amplia y alegre.

Es una manera de estimular a nuestras células para que se encuentren mejor. Nosotros mismos al imaginar este nuevo estado en los órganos estamos logrando dar un dosis de positivismo a nuestro interior, logrando como consecuencia elevar nuestro nivel interior tanto físico como mental.

Por ejemplo si uno se encuentra con depresión podemos imaginarnos la zona de los pulmones y corazón con una gran sonrisa.

Si uno tiene dolor de cabeza, nos imaginamos nuestro cerebro con una gran sonrisa que nos ayudará a quitar el fruncido del entrecejo y así actuaremos en cada órgano que necesitemos activar positivamente.

La forma como nos comunicamos  con el mundo afecta de manera positiva o negativa nuestras relaciones. Siempre debemos buscar la mejor manera para decir las cosas, pues una misma verdad genera diferentes resultados de acuerdo a la forma cómo se comunique. Aquí una historia sacada de Las Mil y una noches que nos hace reflexionar al respecto.

En un país muy lejano, al oriente del gran desierto vivía un viejo Sultán, dueño de una inmensa fortuna.

El Sultán era un hombre muy temperamental además de supersticioso. Una noche soñó que había perdido todos los dientes. Inmediatamente después de despertar, mandó llamar a uno de los sabios de su corte para pedirle urgentemente que interpretase su sueño.

– ¡Qué desgracia mi Señor! – exclamó el Sabio – Cada diente caído representa la pérdida de un pariente de Vuestra Majestad.

– ¡Qué insolencia! – gritó el Sultán enfurecido – ¿Cómo te atreves a decirme semejante cosa? ¡Fuera de aquí!

Llamó a su guardia y ordenó que le dieran cien latigazos, por ser un pájaro de mal agüero. Más tarde, ordenó que le trajesen a otro Sabio y le contó lo que había soñado. Este, después de escuchar al Sultán con atención, le dijo:

– ¡Excelso Señor! Gran felicidad os ha sido reservada. El sueño significa que vuestra merced tendrá una larga vida y sobrevivirá a todos sus parientes.

Se iluminó el semblante del Sultán con una gran sonrisa y ordenó que le dieran cien monedas de oro. Cuando éste salía del Palacio, uno de los consejeros reales le dijo admirado:

– ¡No es posible! La interpretación que habéis hecho de los sueños del Sultán es la misma que la del primer Sabio. No entiendo por qué al primero le castigó con cien azotes, mientras que a vos os premia con cien monedas de oro.

– Recuerda bien amigo mío –respondió el segundo Sabio– que todo depende de la forma en que se dicen las cosas… La verdad puede compararse con una piedra preciosa. Si la lanzamos contra el rostro de alguien, puede herir, pero si la enchapamos en un delicado embalaje y la ofrecemos con ternura, ciertamente será aceptada con agrado…

– No olvides mi querido amigo –continuó el sabio– que puedes comunicar una misma verdad de dos formas: la pesimista que sólo recalcará el lado negativo de esa verdad; o la optimista, que sabrá encontrarle siempre el lado positivo a la misma verdad».

Un discípulo y su maestro estaban caminando por el bosque. El discípulo estaba preocupado por el hecho de que su mente estaba en agitación constante.

Le preguntó a su maestro: «¿Por qué las mentes de la mayoría de la gente están inquietas, y sólo unos pocos poseen una mente tranquila ¿Qué se puede hacer para aquietar la mente?»

El profesor miró al discípulo, sonrió y dijo:

«Voy a contarte una historia. Un elefante estaba de pie recogiendo las hojas de un árbol para comerlas cuando una pequeña mosca se le acercó volando y zumbando cerca de su oído. El elefante se la sacudió moviendo sus largas orejas. La mosca volvió nuevamente y el elefante se la sacudió una vez más.
Esto se repitió varias veces. Entonces el elefante le preguntó a la mosca:

«¿Por qué estás tan inquieta y ruidosa? ¿Por qué no te quedas calmada por un tiempo en un mismo lugar?»

La mosca contestó: «Me siento atraída por todo lo que veo, oigo o huelen mis cinco sentidos, y todo lo que sucede a mi alrededor, me conduce constantemente en todas direcciones, y no lo puedo resistir ¿Cuál es tu secreto ¿Cómo puedes mantenerte tan tranquilo y quieto? «

El elefante dejó de comer y le dijo:

«Mis cinco sentidos no gobiernan mi atención. Estoy en control de mi atención, y puedo dirigirla donde yo quiera. Esto me ayuda a sumergirme en todo lo que hago, y por lo tanto, mantener mi mente centrada y tranquila. Ahora que estoy comiendo, estoy totalmente inmerso en la comida. De esta manera, puedo disfrutar de mi comida y masticar mejor. Puedo controlar mi atención, y no al revés, y esto me ayuda a estar tranquilo.»

Al oír estas palabras, los ojos del discípulo se abrieron y una sonrisa apareció en su rostro. Miró a su maestro y le dijo:

«¡Ya entiendo! Si mis sentidos controlan mi mente y mi atención, mi mente estará constantemente agitada. Por otro lado, si estoy al mando de mis cinco sentidos, podré hacer caso omiso de sus inquietudes, entonces mi mente se calmará».

«Sí, eso es correcto», respondió el maestro, «La mente es inquieta y se dirige donde está la atención. Controla tu atención, y controlarás tu mente.»

Parvati es una de las diosas más amorosas, benevolentes y misericordiosas del panteón hindú. Es la consorte de Shiva y se manifiesta como extraordinariamente compasiva. Cierto día, uno de sus hijos, Kartikeya, hirió a una gata con sus uñas.

De regreso a casa, corrió hasta su madre para darle un beso. Pero al aproximarse al bello rostro de la diosa, se dio cuenta de que ésta tenía un arañazo en la mejilla.

–Madre -dijo Kartikeya-, hay una herida en tu mejilla. ¿Qué te ha sucedido?
Con sus ojos de noche inmensa y profunda, la amorosa diosa miró a su querido hijo. Era su voz melancólica y dulce cuando explicó:

–Se trata de un arañazo hecho con tus uñas.

–Pero, madre -se apresuró a decir el joven-, yo jamás osaría dañarte en lo más mínimo. No hay ser al que yo ame tanto como a tí, querida madre. Una refrescante sonrisa de aurora se dibujó en los labios de la diosa.

–Hijo mío -dijo-, ¿acaso has olvidado que esta mañana arañaste a una gata?

–Así fue, madre -repuso Kartikeya.

–Pues, hijo mío, ¿es que no sabes ya que nada existe en este mundo excepto yo? ¿No soy yo misma la creación entera? Al arañar a esa gata, me estabas arañando a mí misma.

*El Maestro dice: Al herir, te hieres. A quienquiera que dañes, te dañas a ti mismo.

Fuente: :yogainbound.org

1. Aprende a reír:

La risa es el sanador de todos los males. La sonrisa es el bálsamo que calma y se instala. Es la medicina que sustenta una vida de alegría. Ríete en la cara de los problemas. Ríete en el camino de obstáculos insuperables.

Aprende a reírte de ti mismo. Ríe cuando triunfas, y  ríe en la adversidad. Comparte bromas que levantan. Ve comedias limpias que aligeran la carga. Mira siempre el lado divertido y búscalo si es necesario, para descubrir otra razón para reír siempre.

2. Deja de tomarte demasiado en serio a tí mismo:

¿Por qué tan serio? Basta hoy. Relájate. Cuando estás tenso no puedes moverte con fluidez y desarrollar plenamente tus sentidos y si tienes heridas son más difíciles de sanar estando tenso que dejándolas aliviar naturalmente. Hay muchas situaciones que no dependen de ti y cuando te cargas lo que no te corresponde te bloqueas y formas un témpano de ti. Por eso afloja los tornillos,  los lazos de la seriedad y sé libre. Encuentra una razón para celebrar, por más difícil que aparezca el camino, siempre hay algo por qué alegrarse.

3. Rodéate de ganadores:

El hecho es que si quieres ganar en la vida, entonces necesitas construir a tu alrededor una compañía de ganadores – en tu campo de acción y otros que son ganadores en sus respectivos campos.

Los ganadores hacen actos ganadores. Los ganadores tienen palabras ganadoras. Los ganadores a veces pierden, pero no se quedan abajo. Se levantan, sacuden el polvo y comienzan una y otra vez.

4. Toma el hábito diario de la Gratitud:

La gratitud es de vital importancia si deseas permanecer fresco y vibrante en todos tus caminos. Nunca debes dar nada por sentado. Siempre debes dar las gracias, y en todo lo que haces, celebrarás con una actitud de gratitud.

Si observas hay mucho por lo que estar agradecido diariamente: Debes dar las gracias por un día más para respirar, soñar y cumplir con la visión de tu vida. Abraza y besa a tu familia. Abraza a tus amigos. Consiente a sus clientes. Adora a tus asociados. Escribe cartas. Envía correos electrónicos con comunicaciones positivas.

Con cada momento que vives – convierte tu vida una abrumadora expresión de gratitud por haberte dado el privilegio más impresionante para convertirte cada día en “el mejor” de lo que eras ayer. Para que naciste para un momento como este.

5. Persigue tu pasión con entusiasmo:

Todos somos apasionados sobre algo. El problema es que la mayoría de nosotros estamos tan concentrados en ganarnos la vida que nuestras pasiones son a menudo dejadas de lado. Pero para disfrutar realmente del viaje de tu vida, es imperativo que te tomes el tiempo para identificar tus puntos fuertes e invertir tiempo en la búsqueda de tus pasiones – los proyectos, los deseos, y las chispas que se encienden en el interior. A continuación, ve a perseguirlos  con 111% de esfuerzo y concentración.

No permitas que las distracciones de la vida  te resten el disfrutar y alcanzar tu misión en la vida.
La P de pasión también es la P para el progreso, el poder, la productividad, proyectos, propósitos, planes, y Pensamientos Positivos, y todo está envuelto en una vida llena de la búsqueda de tu PASION.

Gástalo siendo feliz y haciendo feliz a alguien más. Los momentos que dejas pasar con sentimientos de frustración, ira, envida, son momentos de vida que has lanzado a la basura, desperdiciado.

La ira no es sólo la ira. La ira es una emoción que encubre el miedo, el dolor o decepción. Cuando te aferras a este sentimiento al que más haces sufrir es a ti mismo incluso llegando al punto de enfermarte físicamente como un reflejo en tu cuerpo de que lo debes soltar. Cuando estás enojado, te duele más porque gastas tu valioso tiempo y fuerza vital y te llenas de energía negativa. Lamentablemente, esa energía negativa a menudo bloquea e impide que la energía positiva entre en tu vida. Así que suéltalo. Aprecia a la persona con la que estás enojado y aprende a vivir con esta persona de la manera que ella o él es, saca lo bueno de la experiencia. Si alguien te molesta constantemente aprecia el hecho de que eres lo suficientemente fuerte para desvincularte de ese sentimiento. No tienes que quedarte allí, es tu elección. Déjalo ir y vive bien tu vida.

Cuando tus seres queridos, compañeros de trabajo, o incluso extraños te dicen y hacen cosas que te hacen daño, muchas veces no es realmente acerca de ti. Las personas en este mundo tienen algunos problemas serios. Y, debido a que no se ocupan de sus asuntos, proyectan esas cuestiones hacia ti. La madre que piensa que ella es la peor madre proyectará y le dirá a otra mamá lo necio y cansón que es su hijo. La adolescente que piensa que ella es fea proyectará y se burlará de otra adolescente.

Así que la próxima vez que alguien hace algo que te trate de hacer daño a ti, recuerda: Nada de lo que los demás hacen es por ti, lo hacen por ellos mismos. Todos vivimos en nuestro propio sueño en nuestra propia mente; los demás están en un  mundo completamente distinto de aquel que vive cada uno de nosotros. Cuando nos tomamos personalmente lo que alguien nos dice, suponemos que sabe lo que hay en nuestro mundo, nos sentimos ofendidos y reaccionamos defendiendo nuestras creencias y creando conflictos…conflictos que en el fondo no son realmente nuestros.

El tiempo no deja de marcar, cada segundo que vives se te va restando del que tienes en total para vivir, entonces aprovéchalo productivamente.

“Que nadie venga a ti sin salir mejor y más feliz. Ser la expresión viva de la bondad de Dios: bondad en tu rostro, bondad en tus ojos, bondad en tu sonrisa”.
Madre Teresa

“No puedes hacer un favor a tiempo, porque nunca se sabe qué tan pronto será demasiado tarde”.
Ralph Waldo Emerson

La comunicación es indispensable para lograr organización y entendimiento en todos los aspectos de nuestra vida, pues es la transmisión de información de un sujeto a otro, que puede ser la pareja, un hijo, el compañero de trabajo, etc.

La comunicación es un arte, ya que es la forma de expresar nuestros pensamientos y sentimientos. Un buen artista analiza qué mensaje quiere plasmar en su obra y busca la forma de materialización que sea práctica, sencilla y más entendible para el observador.

La comunicación es una ciencia, ya que es exacta y precisa. Si decimos palabras ofensivas, conseguimos de inmediato el efecto rechazo en nuestro interlocutor. Si transmitimos palabras dulces  con amor o una sonrisa también conseguiremos el efecto positivo en el otro.

La comunicación es el medio para conocer y entender más acerca del otro y poder llegar a su interior. Debo profundizar e investigar las necesidades del otro para conocer su verdad, que puede ser igual o diferente de mi verdad. Todos interpretamos el mundo de manera diferente.  Pero utilizando eficazmente la comunicación encontramos un punto intermedio que genere hermandad.

Hay que estudiar y perfeccionar diariamente nuestra comunicación para que seamos congruentes con el mensaje que queremos expresar, pues la comunicación abarca no sólo las palabras, sino nuestros gestos, postura,  lenguaje corporal y tono de voz.  El antropólogo Albert Mehrabian realizó estudios durante los años 70 en los que analizaba la importancia relativa de los mensajes verbales y no verbales. Y concluyó:

  • El lenguaje verbal (lo que se dice) participa escasamente en la comunicación de emociones y sentimientos: apenas un 7%.
  • El lenguaje paraverbal (entonación, proyección, tono, énfasis, pausas, ritmo, etc.) corresponde aproximadamente un 38% de la comunicación
  • El lenguaje corporal (gestos, posturas, mirada, movimiento de los ojos, respiración, etc.). Abarca el 55% de nuestra comunicación.

La importancia de los elementos no verbales sobre los verbales aumenta si existen incongruencias entre ellos: si las palabras y el cuerpo están en descuerdo, uno tiende a creer al cuerpo.

Sin comunicación efectiva no hay buenas relaciones