La vida es un camino que recorremos paso a paso, poco a poco, así como en un reloj de arena el tiempo se marca grano por grano.

Es como un laberinto, que cuando encontramos la salida ya no es tan interesante y lo dejamos para buscar y encontrar algo mejor; lleva consigo muchos retos y compromisos pero el secreto para aprender la lección no es evadirlos sino enfrentarlos y darles una solución lógica. Y lo destacado  de ello es la satisfacción que nos queda después de resolverlos.

Nunca debemos quedar en el pasado pensando, pensando y emocionándonos con él….EL PASADO YA PASÓ y no podemos regresar para hacerlo mejor.

Tampoco debemos fijar todos nuestros pensamientos en el futuro, ni tener ansiedad por el mañana, porque todavía no llega y no podemos , por ejemplo, comernos en este instante el pan que se horneará dentro de un mes.

Lo más sensato que podemos  hacer es vivir el hoy, en este mismo instante porque este minuto en el que estás leyendo es el único que podemos vivir y modificar.

Viviendo bien el presente dejaremos un pasado agradable y vamos construyendo  bases sólidas para un futuro feliz.