Entradas

George S. Clason, en su clásico libro «El hombre más rico de Babilonia«, que narra la historia de un personaje llamado Arkad, el cual es el hombre mas rico y prospero de babilonia.  Arkad esta comentándole a dos colegas como fue que consiguió tanta fortuna y como hacia para que su riqueza creciera más y más, mientras el trabajaba menos, asi pues  habla de los 7 remeidos y de las cinco leyes del oro, estas son:

LOS 7 REMEDIOS:

1. Comience a llenar su bolsa.
Arkad aprendio que  era necesario que el se pagara a si mismo. Razon por la cual empezo a ahorrar el 10% de su salario, para de esta manera tener un dinero base con el cual poder llenar su bolsa.

2. Controle sus gastos
. El Panadero, El carnicero, El lechero. Todos ellos son  gastos necesarios para sobrevivir. Pero existen otros gastos que son lujos los cuales solo sacaran dinero de nuestro bolsillo. La idea no es ser tacaño. La idea es balancear estos deseos para que sean gastos controlados.

3. Haga dar frutos a su dinero. Se puede entender como «Haga que el dinero trabaje para usted». Cada centavo que usted ahorra debe generar mas ganancias. Es la habilidad de invertir en buenos negocios.

4. Impida que sus tesoros se pierdan. No dejes en manos equivocadas tus inversiones. No dejes que un obrero te hable sobre joyas. o un lechero sobre madera. Debes buscar los expertos y confiar en que ellos le darán el uso correcto a tu dinero.

5. Haga que su propiedad sea una inversión rentable.
Se resume en una sola frase «Posee tu propia casa».

6. Asegúrese ingresos para el futuro. Debes pensar que en algún momento de tu vida seras viejo. Entonces debes buscar una fuente de ingreso que cubra esta maravillosa fase de la vida. Claro esta que el dinero que has conseguido en tu juventud es el que tendrá que trabajar por ti.

7. Aumente su habilidad en la adquisición de bienes. A medida que vayas desarrollando tu habilidad para colocar a trabajar tu dinero. Debes pensar en productividad, Busca buenos negocios que te permitan adquirir buenos bienes.

LAS CINCO LEYES DE ORO

I. El oro acude fácilmente, en cantidades siempre más importantes, al hombre que reserva no menos de una décima parte de sus ganancias para crear un bien en previsión de su futuro y del de su familia.

II. El oro trabaja con diligencia y de forma rentable para el poseedor sabio que le encuentra un uso provechoso, multiplicándose incluso como los rebaños en los campos.

III. El oro permanece bajo la protección del poseedor prudente que lo invierte según los consejos de hombres sabios.

IV. El oro escapa al hombre que invierte sin fin alguno en empresas que no le son familiares o que no son aprobadas por aquellos que conocen la forma de utilizar el oro.

V. El oro huye del hombre que lo fuerza en ganancias imposibles, que sigue el seductor consejo de defraudadores y estafadores o que seña de su propia inexperiencia y de sus románticas intenciones de inversión.

Este es un libro que recomendamos ampliamente!