Entradas

Por la simple razón de que el verdadero amor, no es posesivo, no exige nada, sino que se entrega sin condición, sin razón, (se ama, porque se ama, no porque haya una razón para amar) y libremente.

La verdadera libertad, consiste en tener lo más importante del mundo, sin poseerlo.

El amor no esta en la otra persona, sino dentro de nosotros mismos y necesitamos del otro para que despierte.

Uno entrega su amor libremente a otra persona, pero no con el fin de poseerlo, pues no somos, su esclavo o su amo, o un objeto que se pueda comprar, usar y tirar, somos seres con una capacidad enorme de amar y de manifestar amor hacia los demás, sin esperar nada.

El que da, debe de ser capaz de recibir.

«The Green Mile» es una película de 1999 cuya trama trata de una cárcel en la década de los  30’s, a donde  llega un nuevo preso al Pasillo de la Muerte, lugar en donde los condenados a la pena de muerte esperan su ejecución. Se trata de John Coffey, un negro gigantesco acusado de asesinar a dos niñas. Sin embargo, su actitud temerosa y su temperamento gentil llaman la atención de uno de los guardias, quien no sólo dudará de la culpabilidad de Coffey, sino también descubrirá que los milagros existen y pueden suceder donde sea, incluso en ese lugar.

Algunas frases extraidas de esta recomenda película son:

  • «No se oculta lo que hay en el corazón».
  • «Sé muy poco de nada».
  • «A veces mi milla verde parece interminable».
  • «Las mató con el amor que ellas se tenían. Y eso sucede cada día. Y sucede por todo el mundo».
  • «Tengo ganas de que acabe todo esto de verdad, estoy cansado jefe, cansado de recorrer el mundo solo como un gorrión bajo la lluvia, cansado de no tener un amigo con quien estar, que me diga donde vamos, con quien venimos y por qué. Cansado de las personas que son feas con las otras, estoy cansado del dolor que siento yo y oigo por el mundo cada día, hay demasiado dolor, son como trozos de cristal por mi cabeza, que no puedo quitarme, ¿Puedes entenderlo?».

[campo nombre=video]

William Kamkwamba, un niño de Malawi, a la edad de 14 años, en la pobreza y hambruna,  construyó un  molino de viento para dotar a su casa de electricidad. Ocho años más tarde, explica con sus propias palabras la emotiva historia del invento que cambió su vida.

Este joven nos enseña que cuando nos enfrentamos a situaciones extremas, si tenemos un sueño por cumplir, nos llena de motivación para sacar lo mejor de cada situación por precaria que se nos presente, y podemos convertir los obstáculos en un medio para alcanzar nuestros objetivos.

William vivía en la extrema pobreza con hambre y sin educación(porque si pagaba sus estudios no comía por lo menos una vez al día), pero buscó estudiar por su cuenta. Estaba determinado a hacer todo lo que pudiera para recibir educación. Así que fue a la biblioteca, leyó libros de ciencia, especialmente de física y aunque no entendía el idioma, veía los diagramas y las fotos para aprender las palabras alrededor de ellos.

Allí encontró un libro que decía que un molino de viento podía bombear agua y generar electricidad. Bombear agua significa riego. Una defensa contra la hambruna que pasaba con su familia en ese tiempo. Así que se aventuró a construir un molino de viento. Pero no tenía materiales, entonces buscó en el almacén de chatarra donde acondicionó lo que tenía para lograr su sueño, aunque mucha gente, incluyendo su madre, decía que estaba loco. Su invento lo llevó a viajar y a dar conferencias como la que puedes ver a continuación.

En sus palabras: «Si estás luchando por tus sueños, confía en tí mismo y cree. No importa lo que pase. No te rindas!»

 

[campo nombre=video]

La alimentación vegetariana y vegana ha sido practicada desde la antigüedad por quienes han seguido el sendero del yoga, de la bondad y la purificación.

Hoy también hay cientos de razones por las cuales una persona puede ayudar a solucionar las condiciones del mundo haciéndose vegetariano y/o vegano.

No más comidas rápidas.  Procura comprar ingredientes orgánicos y preparar una rica comida con amor, ofrecérsela a Dios y purificarse al comer alimentos.

No usar colorantes artificiales, saborizantes químicos, preservativos, y miles de otros horrores, que producen enfermedades que el departamento de control de drogas y alimentos aún no ha prohibido, debido a su conveniencia o ignorancia.

No utilizar azúcar refinada, ni harina blanca. El azúcar refinada es verdaderamente venenosa, adictiva, y está contaminada con hueso animal en su proceso de blanqueamiento. La primera etapa de la producción de azúcar, donde el jugo dulce se convierte en una melaza espesa, es el endulzador más puro. Debido a la escasez de tal melaza pura, algunas veces usamos azúcar morena cruda o gour (que recibe varios nombres en diferentes países). Incluso el azúcar blanca ha sido usado en algunos casos, pero ésta se puede evitar, ya que los endulzadores naturales crudos ahora son más accesibles.

Evitar alimentos contaminados y en exceso.

Es apropiado seguir el buen consejo nutricional de comer frutas y verduras, semillas, tomar mucha agua y de esta manera mantener una dieta balanceada.

La limpieza de nuestro organismo nos acerca a la Divinidad. Si nos mantenemos interna y externamente limpios, las defensas de nuestro cuerpo se mantendrán simpre fuertes y alertas.

En mi infancia y adolescencia cuando veía películas orientales en las que hacían unos saludos inclinando el cuerpo con una pequeña o gran reverencia me parecía que eran demasiado exagerados y que los que lo hacían mostraban señales de inferioridad ante quien le hacían el saludo.

¡Cómo cambia la forma de ver las mismas situaciones a lo largo de la vida!, ahora veo que el Gassho como se llama este saludo es una forma de mostrar respeto hacia uno mismo y hacia quien lo hace desde lo más profundo del ser. Si todos aprendiéramos y practicáramos el gassho, o las formas de saludar que nos enseñan las culturas ancestrales nos soltaríamos de tantos condicionamientos que nos separan del corazón de los demás seres y podríamos tener un mundo más armonioso y lleno de respeto.

Gassho es un gesto de respeto hacia los demás y hacia todas las existencias. Dirige el espíritu por encima del ego y de las consideraciones personales. Gassho crea armonía entre los seres, por muy diferentes que sean. Cuando la acción es la justa, el mundo se vuelve justo. Cuando hacemos sinceramente gassho por los demás, se crea una mutua simpatía. Si lo hacemos por el universo entero, incluso los árboles, las montañas y los ríos sienten esta simpatía y nos la devuelven a su vez.

Lo que una vez disfrutamos, nunca lo perdemos. Todo lo que amamos profundamente se convierte en parte de nosotros mismos.

Hellen Keller

De acuerdo a la filosofía védica el ser humano está compuesto por cinco cuerpos(pancha kosha) que se interrelacionan entre sí, los cuales son nuestro instrumento de vida y debemos cuidar, alimentar y ejercitar cada uno de ellos para tener un equilibrio en nuestro existir.

  1.  EL CUERPO DENSO O FÍSICO BIOLÓGICO (annamaya kosha) El cuerpo físico es el vehículo hecho de comida; que se nutre, desequilibra y sana por la acción de los jugos que extrae de los alimentos, y por el aire que respira (oxígeno). Es el cuerpo visible que nace, crece, se reproduce, se enferma, muere, y sus componentes regresan a la tierra y a la cadena alimenticia. Es el vehículo que aloja hasta el momento de su muerte al cuerpo sutil y al alma espiritual en su viaje hacia la Autorrealización.

  2.  EL CUERPO SUTIL que no es visible para el ojo físico, es intangible, pero que experimentamos continuamente en sus distintas fases. Comprende en el ser humano el aspecto energético, vital, mental, emocional y psíquico(conformado por el cuerpo pránico, el cuerpo mental o la mente y el cuerpo intelectual o la inteligencia).

    a)     EL CUERPO PRÁNICO (pranamaya kosha)Es la envoltura compuesta de prana o energía vital, que conecta la envoltura de alimento con el cuerpo mental permitiendo que ambos actúen juntos. Este cuerpo se nutre, desequilibra y sana por medio del prana que el hombre extrae de múltiples fuentes como el sol, el aire, el agua, la tierra y los alimentos en la modalidad de la bondad (sáttvicos).

    b)     EL CUERPO MENTAL (manomaya kosha) Comprende la mente y sus partes: consciente, inconsciente y subconsciente. La mente trabaja con los datos que le suministran los órganos de percepción y la información almacenada en la memoria, registrando los fenómenos externos e internos para dar forma al mundo que le rodea, a través de las diferentes emociones, palabras, sensaciones, pensamientos, imaginaciones, y demás experiencias del individuo; las que la nutren, desequilibran o sanan.Es también el lugar de las emociones y los sentimientos, registra los fenómenos internos y externos y realiza la función del pensamiento, y se alimenta de las experiencias de la persona.

    c)     EL CUERPO INTELECTUAL (Vijñanamaya kosha) La inteligencia es el principio discriminador que evalúa, determina y decide antes de pasar a las cubiertas menos sutiles. Controla y guía a la mente; y está en contacto con el mundo externo a través de los principios de los cinco sentidos: sonido, textura, forma y color, sabor y olor. Vijñanamaya kosha se alimenta, desequilibra y sana por acción del conocimiento, estudio y análisis.

  3. EL ALMA (anandamaya kosha) El alma es el Ser. parte o porción del Señor Supremo. Es una chispa de energía espiritual pura que proviene de Él. Esta energía se difunde por todo el cuerpo y es la causa por la cual sentimos diversos dolores o placeres en cualquier parte del mismo. Aunque no podamos ver al alma, su presencia puede ser comprendida simplemente por la conciencia. La conciencia es el síntoma de la presencia del alma, un cuerpo material sin conciencia es un cuerpo muerto. La naturaleza del alma es eterna-sat, sin nacimiento ni muerte, sin principio ni fin. No se la mata cuando se mata el cuerpo. Es inmutable, no sufre ningún cambio. Es plena de conoci-miento-chit, es conciencia y consciente, permanece como testigo durante todos los estados de la experiencia.El alma se alimenta, desequilibra y sana por acción de  mantras y oraciones.

En un pequeño pueblo, en el valle, vivía un hombre que siempre estaba feliz, amable y bien dispuesto para todos los que conocía. Siempre sonreía, y tenía palabras amables y alentadoras que decir, cada vez que era necesario. Todos los que lo conocían, se sentían mejor, más felices y eufóricos. La gente sabía que podía contar con él, y lo consideraba un gran amigo.
Uno de los habitantes de la aldea tenía curiosidad por saber cuál era su secreto, y cómo siempre podría ser tan amable y servicial. Se preguntó, ¿cómo es que él no tenía ningún rencor hacia nadie, y siempre estaba feliz.

Una vez, al encontrarse con él en la calle le preguntó: «La mayoría de la gente es egoísta e insatisfecha.  No sonríen tan a menudo como tú lo haces, tampoco son tan útiles y serviciales como tú ¿Cómo puedes mantenerte así..?»

El hombre sonrió y le contestó: «Cuando uno hace la paz consigo mismo, puede estar en paz con el resto del mundo. Si puedes reconocer el espíritu en sí mismo, puedes  reconocer el espíritu de cada uno, y luego lo encuentras natural para ser amable y bien dispuesto para todo. Si tus pensamientos están bajo tu control, puedes llegar a ser fuerte y firme. La personalidad es como un robot programado para hacer ciertas tareas. Tus hábitos y pensamientos son las herramientas y programas que controlan tu personalidad. Hazte libre de ser programado, y luego el bien interior y la felicidad que residen dentro de ti serán revelados. »

«Pero un montón de trabajo es necesario. Los buenos hábitos deben ser desarrollados. La capacidad de concentración y de controlar los pensamientos tiene que ser fortalecida. El trabajo es difícil e interminable. Hay muchos muros que deben ser escalados. Es una tarea ardua «. Lamentó el aldeano.

«No pienses en las dificultades, pues lo que pienses es lo que vas a ver y experimentar. Sólo aquieta tus sentimientos y pensamientos, y trata de mantenerte en  paz. Sólo trata de mantener la calma .y no te dejes abrumar por la corriente de tus pensamientos. »

«¿Eso es todo?» -Preguntó el campesino.

«Trata de ver tus pensamientos cómo vienen y van. Permanece en silencio en el presente. Los momentos de paz serán breves al principio, pero con el tiempo se harán más largos. Esta paz es también la fuerza, el poder, la bondad y amor al tiempo. Te darás cuenta de que eres uno con la corriente universal, y esto te llevará a actuar desde una dimensión diferente (punto de vista, la conciencia, no del egoísmo) »

«Muchas gracias por sus consejos y explicaciones», dijo el aldeano, y se fue feliz y satisfecho.

Lotus Flower Lotus Rainbow Colorful  - Matryx / Pixabay

Matryx / Pixabay

Al dejarte llevar por el corre corre de la vida cotidiana a veces podemos actuar en automático y no darnos cuenta del sentido real de nuestras obras o de lo que decimos repetitivamente.

Hablamos y no nos damos cuenta del significado de nuestras palabras, por ejemplo según la Real Academia de la lengua Española “saludar es Dirigir a alguien, al encontrarlo o despedirse de él, palabras corteses, interesándose por su salud o deseándosela, diciendo adiós, hola, etc”. Lo que podríamos traducir en una transmisión de buena onda o buena energía, transmitir buenos deseos. Si tan sólo meditáramos en ello y lo adoptáramos tomando consciencia cada vez que saludamos, muchas diferencias y malestares se sanarían pues estaríamos concentrados con todos nuestros sentidos y nuestra energía enviando esos buenos deseos a la persona que nos encontramos y al mismo tiempo recibiéndolos de vuelta. Sería un mundo de buenos deseos.

Desde mucho tiempo atrás San Francisco de Asís hacía referencia de esto a sus seguidores con respecto a su saludo “Que la paz sea contigo” diciendo:
«Que la paz que anunciáis de palabra, la tengáis, y en mayor medida, en vuestros corazones Que ninguno se vea provocado por vosotros a ira o escándalo, sino que por vuestra mansedumbre todos sean inducidos a la paz, a la benignidad y a la concordia. Pues para esto hemos sido llamados: para curar a los heridos, para vendar a los fracturados y para corregir a los equivocados.» (3Comp 58).

Aquí relacionamos el significado de saludos en diferentes culturas que nos muestran que no importa el lugar del planeta en el que te encuentres, siempre hay esa intención de buenos deseos y buena vibra con los que te rodean.

Saludo maya :
In lak’ ech: yo soy otro tu
A lo que respondían: Hala ken: tú eres otro yo

Saludo Inca:
Ama sua, ama lluclla, ama quella que significa “no robes, no mientas, no seas perezoso»

Saludo Hebreo:
Shalom significa Hola Adios y paz

Saludo Maorí(Nueva Zelanda):
Kia Ora significa literalmente «que tengas salud» o «que estés bien»

Saludo Antiguos Hawaiianos, los Kahuna:
Aloha”: La traducción literal de Aloha es: «Aliento de Vida» o «Esencia»«Reconozco en tu interior la misma esencia que reside en mí, y me ofrezco a ti».

Saludo Zulu sudafricano:
Sawabona: (Africano) : Yo te Respeto, yo te valoro y tú eres importante para mí
Respuesta: Shikoba: Entonces, yo existo para tí

Saludo Islámico Egipto:
As-salaam-alaykum: Que la paz sea contigo

Saludo de India y Asia del Sur:
Námaste Se usa en varias tradiciones budistas así como en numerosas culturas en Asia, para saludar, despedirse, pedir, dar gracias, mostrar respeto o veneración y para rezar. Normalmente se acompaña por una inclinación ligera de la cabeza hecha con las palmas abiertas y unidas entre sí, ante el pecho, en posición de oración.

Namaste Significa “Yo honro el lugar dentro de ti donde el Universo entero reside. Yo honro el lugar dentro de ti de amor y luz, de verdad, y paz. Yo honro el lugar dentro de ti donde cuando tú estás en ese punto tuyo, y yo estoy en ese punto mío, somos sólo Uno”.

La inteligencia sin amor, te hace perverso.
La justicia sin amor, te hace implacable.
La diplomacia sin amor, te hace hipócrita.
El éxito sin amor, te hace arrogante.
La riqueza sin amor, te hace avaro.
La docilidad sin amor, te hace servil.
La castidad sin amor, te hace orgulloso.
La pobreza sin amor, te hace orgulloso.
La belleza sin amor, te hace ridículo.
La verdad sin amor, te hace hiriente.
La autoridad sin amor, te hace tirano.
El trabajo sin amor, te hace esclavo.
La sencillez sin amor, te envilece.
La oración sin amor, te hace introvertido.
La ley sin amor, te esclaviza.
La política sin amor, te hace ególatra.
La fe sin amor, te hace fanático.
La cruz sin amor, se convierte en tortura.
La vida sin amor, no tiene sentido.