Que no te inhabilite el miedo a lo desconocido
El miedo a lo desconocido es una cosa difícil de manejar para la mayoría de la gente. Este sentimiento nos paraliza y es el responsable de mantenernos atrapados en situaciones que no nos hacen felices. Malas relaciones, carreras ingratas y sueños ahogados a menudo vienen a la mente.
Pero, si quieres salir del atasco, romper con las cadenas del miedo y, finalmente, ponerte en el camino hacia lo que quieres en la vida, aquí hay tres preguntas que puedes hacer para ayudarte a poner las cosas en perspectiva cuando tienes ante ti una decisión que te produce miedo:
¿Qué es lo peor que podría suceder si haces esto y fallas?
Es comprensible que nadie quiere centrarse en lo negativo. Siempre hay un riesgo de fracaso, y es importante sopesar ese riesgo. Por lo general, el riesgo es bastante pequeño (que no obtengas los resultados a tiempo, podrías perder algún dinero, o perder un par de horas). Otras veces, el riesgo puede ser realmente grande, y es importante tener claridad sobre eso también (por ejemplo que si tu paracaídas no se abre, que puedas ir a la cárcel, o tu carrera o tu reputación queden arruinadas). De cualquier manera, es importante mencionar realmente el peor de los casos aquí, así puedes tener una idea real sobre el fundamento de tu temor.
¿Cuáles son las consecuencias de no hacerlo?
Puede ser difícil tomar acción y hacer frente a las cosas que nos asustan. A menudo, puede parecer más fácil simplemente no tomar medidas, pero se trata de una elección en sí misma que trae otras consecuencias. Si optas por no hacer nada debes preguntarte:¿Qué oportunidades te pierdes y lamentarás? ¿Cómo te sentirás en 5, 10, o 20 años de tiempo, mirando hacia atrás al preguntarte acerca de lo que podría haber sido?
Muchas veces no actuar puede dar lugar a un patrón de pasividad en nuestras vidas. Nos acostumbramos a no tomar medidas y que nos hagan dudar, posponer las cosas, y seguir igual en todos los ámbitos de nuestra vida.
¿Qué pasaría si lo haces y consigues éxito?
La última pregunta que debes realizarte, ¿Vale la pena el esfuerzo? ¿Vale la pena la batalla para abrazar tus miedos y comenzar tu propio negocio, ganar una vida cómoda haciendo algo que te gusta, y trabajar en tus propios términos? ¿Vale la pena decir que por fin ya es suficiente y empezar la dieta, perder todo ese peso que te ha acomplejado y evitado vivir una vida más larga y saludable?
Si te centras en el beneficio, te podrás sentir mucho más motivado para seguir adelante y tomar las medidas para dejar que el miedo te detenga.
Pesar tus opciones
Una vez que tengas las respuestas a estas preguntas, pregúntate cuál pesa más y una vez tengas claridad sobre la realidad de las circunstancias, puedes estar en una posición mucho mejor para hacer una elección informada.
«La acción no siempre trae felicidad;. Pero no hay felicidad sin acción» – Benjamin Desraili